viernes, diciembre 18, 2009

Cuando calienta el sol...


Y sí, se viene el verano aquí en Ciudad Gótica.
Empieza a hacer “calor” de verdad, las mañanas soleadas dan ganas de saltar de la cama y tomarse un juguito de pomelo bien helado, de salir a correr, de tomar un poco de color en esa piel amarillenta que te dejó un invierno perruno y una primavera inestable.
Huele a jazmines por todas partes y el verde es de un esplendor manifiesto. Por la tarde uno espera la brisa a la caída del sol, y entonces se acomoda en una reposera en el patio y lee mucho, con más ganas, con ganas de que la luz no se termine porque se siente tan bien estar allí, rodeada de plantas recién regadas y de hijos que juegan con poca ropa y en patas, y uno NO TIENE PORQUE PREOCUPARSE de que estén desabrigados, de que salgan en patas o con los pelos mojados, porque ya no le cuelgan los mocos, ni tienen angina, ni fiebre, ni tos, ni ninguna peste por la cual sentirse afligido si desobedecen a las instrucciones precisas de cuidarse.
Se terminaron las clases, y con ello, las angustias por los exámenes y las tareas, los útiles que se pierden invariablemente de un día para otro y vuelven inútiles a las cartucheras, el uniforme que tienen que usar al otro día y no se llega a secar porque hace cinco días que llueve y se estamparon el menú de tres días en él. Y la libreta de notas, y los materiales de plástica que podrían ambientar una peli de Stanley Kubrick, que te salen un huevo y terminan la mitad en la basura.
Con el calor llegan los helados, las frutas de estación, la ensalada rusa y el vitel toné, los licuados y la chocolatada fría ( qué bendición!!, ya no hay que limpiar el microondas cuando se te pasó de caliente y salió eyectada a 3000 rpm). Y lo mejor es que ya no tenés que repetir veintiocho veces que se vayan a dormir porque al otro día no los levantás ni con una grúa, porque al otro día si duermen más es mejor, entonces si se quedan hasta las 3 de la mañana mirando la tele o jugando en la compu o armando legos o boludeando con Indi, ESTÁ BÁRBARO!!!!!!.
Con el calor vuelvo a tener más ganas de leer literatura y de escribir y ya no me siento traumada si no leí el último artículo de la especialidad.
Hace calor, che…no me jodan.

2 comentarios:

  1. ¡Eso! campaña por un verano todos en patas.

    ¡Qué lindo esto que escribiste, Cirita!

    Y llenar la pelopincho y si hace mucho calor, meterse hasta de noche, y comer cualquier pavada y...

    Besos veraniegos.

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  2. y... tomarse una copa de viogner bien helado, como la que me tomé esta noche.
    Ah si, mi querida Milenius, a cierta edad, el verano y el solcito son bendiciones!.
    Y el final de las clases es LO MÁS !!!!

    UN ABRAZOTE

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