
Una, la mayor, llegó solita, allí rosada y temblorosa como un paquetito de ternura y temor. Recuerdo que cuando la miré por primera vez pensé: Es fea como una ratita mojada por horas y horas de copiosa lluvia, e inmediatamente la amé con toda mi alma y conté cada segundo hasta que me la apoyaron sobre mi pecho y ella encontró su lugar. Aún hoy, después de doce largos años, cuando se apoya sobre mi pecho se acomoda como aquella primera vez. Su piel es blanca como la luna y sus cabellos tienen el color de toda la naturaleza. Desde muy chiquita le cuento siempre la misma historia (que ella reclama de tanto en tanto). El día que Dios tenía que diseñar su pelo, se despertó de muy buen humor: _Ah!! Que bien dormí anoche, que hermoso despertar tuve hoy!!_ Un Dios muy contento llamó a su primer ángel secretario: _Y bien, que me toca hacer hoy, querido ángel?_ Bueno, entre otras cosas, Señor, hoy le toca definir los colores del pelo de V._ . Dios pensó unos instantes… _el pelo de V?, que puedo decirte ángel, he tenido una noche de sueño espléndido, hoy me he levantado de un humor fabuloso, y mira, mira los colores del amanecer… no son increíbles?, mira esos colores rosados y ocres atrapados por la niebla y el níveo reflejo de las nubes…¡Así!, exactamente así tiene que ser el pelo de V!!. Tiene que tener esos colores, y cuando el sol lo ilumine debe desprender reflejos dorados!!. Que así sea!. Y así fue. El pelo de V tiene todos los colores del amanecer y cuando el sol lo ilumina reluce como el oro de los dioses.
Es mi compañera, mi “pepe grillo”, mi reflejo en la luna del espejo, es mi pedacito de pan recién sacado del horno, mi dulce de frutos rojos, mi frágil piedrita de ámbar, la voz interior de mis momentos de crisálida. A veces siento que no hay solución de continuidad entre ella y yo, que seguimos unidas por siempre por una sustancia ignota y lejana.
V toca el violín y lee catorce veces sus libros más amados (Como “Quien le tiene miedo a Demetrio Latov”), mira dieciocho veces las películas que adora ( Como una de una pareja de tenistas que juegan en Wimbledon), cuestiona y desmenuza afirmaciones y declaraciones, llora fácilmente por pavadas y difícilmente por cosas serias. Le encanta el roquefort, el salmón rosado y los fideos mediterráneos, a todo lo que come lo cubre de pimienta negra, saborea con placer la mermelada inglesa, toma café negro ( aunque no la dejo) y dice que cuando pueda tomar alcohol, lo primero que va a tomar es fernet. Tiene algunos defectos serios: Le encantan los Jonas Brothers y Hannah Montana, y desde hace unos meses mira Isa TKM, un bodrio venezolano, de 9 a 10 de la noche.
Duerme con siete peluches y cuatro almohadas.
Es hermosa.
Es muy inteligente.
Es muy sensible.
Habla un inglés precioso.
Es bellamente sarcástica.
Es mi hija.
La amo
Y los otros tres?... Son trillizos.
Y cada uno de esos tres pendejos DIVINOS, merecen otra entrada