lunes, octubre 05, 2009

Domingo jardinero


Si, efectivamente, el domingo hermosee mi jardín.

Temprano nos fuimos con M, el soldadito de azúcar y T, el lemurcito dorado, a buscar todo: tierra, abono y nuevas plantucas , la mayoría con flores, claro, porque si hay un tiempo en el que yo “renazco” es en la primavera.
Fuimos al vivero de Diego, que queda acá cerquita, en el barrio. Ayer fue un día de sol hermoso, así que cuando ya desde lejos divisamos todo el colorido de las plantas de Diego, el corazón nos empezó a latir fuerte.
Elegí ( porque los otros dos ya andaban jugando a la escondida entre las plantas, los arbolitos, las jardineras y los maceteros) alegrías del hogar rojas y blancas, malvones pensamiento rosas y lilas, una enredadera que da una flor blanca con forma de campanilla que larga polen como si fuera una fuente, un jazmín del cabo que está que revienta de pimpollos y cuando se sosegaron un poco, T y M se eligieron un cactus que ya está por florecer.

Y si por mi fuera, seguía embolsando colores, pero los chicos me decían: Mami, ¡¡¡CONTROL!!!. En esa estábamos, cuando T, culito inquieto, se mete por detrás de una media sombra y descubre una gata con su cría. Empezó a llamar a los gritos a su hermano, y Diego les contó que la gata se había ido a tener los gatitos a su vivero, y que el los cuidaría hasta que crecieran lo suficiente para regalarlos, de hecho uno, ya estaba prometido a una nena.
Y entonces…sí, caí víctima del influjo maternal, y sin pensarlo dije: ¿Nos regalás uno a nosotros?. ¡¡¡¡SI!!!!!, gritaron M y T, Si mami, si mami, si mami, llevemos uno a casa!!!.
Diego les dijo que si, pero que se lo podían llevar dentro de un mes. Los llevo a la caja y lo elegimos. Es hermoso, de pelaje atigrado. Diego anotó sus nombres en la caja y se los puso en las manos, para los saludos de protocolo, claro.

Yo no les puedo explicar, por más arte que le ponga a la palabra, la belleza, la luz que irradiaba el rostro de mis hijitos cuando tomaron a Indi entre sus manos.
Porque así lo llamaremos: Indi, por Indiana Jones. Indi lanzó unos quejiditos como diciéndoles: ¡Hola chicos! Y entonces terminadas las presentaciones de rigor lo devolvimos a la caja para que siguiera acurrucándose con su mamá.
Y así volvimos a casa, con dos bolsas de tierra, plantas bellísimas y la emoción de tener un integrante más en la familia…dentro de un mes.
Trabajamos toda la tarde en el jardín. Quedó muy lindo, pero todavía le falta…así que esperen, ya lo voy a mostrar cuando la tarea esté acabada.
Por ahora les dejo esta letra, que me gusta, y vaya a saber uno por qué, se relaciona con mi estado de ánimo de ayer, hoy.

Nace una flor, todos los días sale el sol

de vez en cuando escuchas aquella voz.

Cómo de pan, gustosa de cantar, en los aleros de mi mente con las chicharras.

Pero a la vez existe un transformador

que te consume lo mejor que tenés te tira atrás, te pide más y más
y llega un punto en que no querés.

Mamá la libertad, siempre la llevarás

dentro del corazón

te pueden corromper

te puedes olvidar pero ella siempre está

Mamá la libertad, siempre la llevarás dentro del corazón

te pueden corromper

te puedes olvidar pero ella siempre está

Ayer soñé con los hambrientos, los locos,

los que se fueron, los que están en prisión

hoy desperté cantando esta canción

que ya fue escrita hace tiempo atrás.

Es necesario cantar de nuevo,

una vez más.

Inconsciente Colectivo. Charly García

1 comentario:

  1. Hola Cirita: hermosa, soleada, tierna y colorida entrada ... yo fuí niño con gatitos y eso creeme que a tus chicos no se les olvidará jamás ... como a mí no se me olvida ésta MARAVILLOSA canción de gran Charly García en la voz de la querida Negra Sosa ...
    En fin, muy lindos recuerdos, gracias por apretar mi 'botón' de la memoria!

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